El INTA estimó en su último Informe Agrometeorológico Semanal, que el fenómeno de «El Niño» entrará en una fase neutral a partir del trimestre abril-junio, y «hacia julio-septiembre 2024 la mayor probabilidad (más del 60%) se asigna a la fase La Niña».
El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) advirtió sobre un probable regreso del fenómeno climático «La Niña» en la segunda mitad del año, tras el debilitamiento de «El Niño».
«Para el trimestre febrero-marzo-abril, todos los modelos indican un debilitamiento de los valores cálidos de la temperatura del Océano Pacífico ecuatorial», consignó el INTA en su último Informe Agrometeorológico Semanal.
Por ello, indicó el organismo, «se espera que El Niño continúe presente durante lo que resta del verano e inicio del otoño, con una transición hacia la fase neutral del ENSO (El Niño Oscilación del Sur, en inglés) a partir del trimestre abril-junio».
«Posteriormente, la mayoría de los modelos coinciden en indicar la continuación del enfriamiento del Océano Pacifico central», agregó el trabajo.
De esta manera, completó, «hacia julio-septiembre 2024 la mayor probabilidad (más del 60%) se asigna a la fase La Niña».
Récords en Argentina: concluyó la primera ola de calor de la temporada
La primera ola de calor de la temporada 2023/2024 llegó a su fin, no sin antes dejar gran cantidad de récords y datos extraordinarios. Este evento sorprendió por dos motivos: su duración y la extensión territorial que alcanzó. La situación comenzó el 21 de enero de 2024 y finalizó el 12 de febrero. Un total de 23 días consecutivos en los que alguna zona de Argentina fue afectada por una ola de calor. En cuanto a su alcance, el evento fue extraordinario: absolutamente todas las provincias de nuestro país registraron ola de calor en algún momento de ese periodo.
El incremento de temperatura comenzó en el norte de la Patagonia y la región de Cuyo, a raíz de la ubicación de un centro de alta presión en la región central de Argentina, Uruguay y sur de Brasil. La circulación de vientos favoreció el ingreso de aire cálido que se desplazó de norte a sur bordeando la cordillera de los Andes. Además, el aire aumentaba su temperatura día a día gracias a las condiciones soleadas predominantes en la región.
Lentamente el calor se propagó hacia el centro y norte del país, elevando tanto las temperaturas máximas como las mínimas. El evento tuvo dos momentos en los que se intensificó y extendió afectando a la mayor cantidad de territorio: el primero fue entre el 31 de enero y el 3 de febrero, y el segundo entre el 5 y el 7 de febrero. En ambas situaciones la ola de calor estaba presente en más de 55 estaciones meteorológicas.
Dentro de este período extenso de ola de calor varias localidades superaron su récord de temperatura máxima diaria más alta, algunos para enero y otros para febrero.
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